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Una vez más casa llena en Hannover
El 26 de septiembre, fuimos invitados como oradores en nuestro propio nombre en Hannover.
Bajo el lema "El autismo y la comunicación", todo el día estuvo lleno de diversas ponencias sobre autismo y comunicación. Después de la pausa para el almuerzo, fuimos Hanne, Florin y yo con nuestra "Conferencia sin hablar: lectura interactiva con letreros, imágenes y comunicación apoyada". Por supuesto, estábamos un poco emocionados con tantos oyentes, pero después de la conferencia hubo muchos elogios y felicitaciones de los participantes. Nosotros, nuestro equipo, queremos agradecer a los organizadores por la invitación
Este fue un evento mío solamente. Exhibí algunas de mis pinturas e interactué con el numeroso público.
Dos personas autistas presentan su libro "Palabras e imágenes de la vida" en la Kulturgießerei. Julian Bodem y Florin Müller perciben el mundo de manera diferente a la mayoría de las personas: ambos son autistas. Pero eso no significa que no enfrenten lo que sucede a su alrededor con ingenio y sentimientos. Y aunque no pueden hablar, son capaces de expresar su ser más íntimo con imágenes y textos. En una lectura de autor poco convencional para la presentación de su nuevo libro, lo demostraron en la Kulturgießerei Saarburg. Sin embargo, una lectura en la que ni escritor ni ilustrador pueden hablar es un poco más compleja. Sentados en el fondo del podio, los hermanos de los dos recitan extractos del libro. Bodem y Müller se comunican con el público a través de ordenadores portátiles y proyectores conectados. Esto es bastante agotador para ellos: encontrar las teclas correctas solo requiere concentración. Y si alguien se mueve en el pasillo, es una distracción inmediata. La moderadora Hanne Kloth apoya con gestos y palabras: los conoce desde hace mucho tiempo y sabe cómo ayudarlos. "Una persona autista a veces necesita un toque en el brazo para incluso percibir dónde está su propio brazo", explica Kloth uno de los desafíos. A pesar de estos obstáculos, es posible establecer un diálogo entre autores y visitantes. Se muestra una pintura: un acróbata de cuerda se balancea a alturas vertiginosas sobre el abismo de un río embravecido. "La violencia hace estragos entre Flo y yo", escribe Julian Bodem, que pasó por su mente cuando pintó este cuadro. Para ella, la vida es un acto de equilibrio constante. Algunos días tienen éxito en lo que se propusieron hacer. Pero luego eres bloqueado de nuevo por tus propias restricciones o incomprendido por el entorno. A través de la escritura, y con Julian Bodem sobre todo a través de la pintura, logran una y otra vez romper esta barrera. Esto les permite expresar lo que la amistad significa para ellos, por ejemplo. "Ayuda, corazón, paz en cada problema", comienza un poema de Florin Müller sobre este tema. Bodem ha creado un motivo "Juntos a través de la vida". Su amistad a menudo se encuentra con incredulidad, cuando se sientan uno al lado del otro, aparentemente sin darse cuenta el uno del otro. Para ellos, sin embargo, el asunto está claro. "La amistad encarna la ayuda en una forma pura y correcta", dijo Müller en una explicación. Pero el dúo no solo expresa sentimientos en su libro, sino que también toma una posición sobre los eventos actuales. El poeta Florin Müller, que por su propia admisión está muy interesado en la política, responde a la pregunta sobre la situación mundial de la siguiente manera: "Estoy afligido por el gran peligro de la violencia de derecha". En su trabajo, los autores también abordan críticamente el destino de los refugiados en el Mediterráneo. Más a menudo, ambos experimentan que otros piensan que son estúpidos. Están tratando de aclarar este error judicial. Tienen éxito en esto, entre otras cosas, al informar de manera autorreflexiva sobre sus propias limitaciones y compulsiones impuestas por el autismo. En uno de los poemas, se compara con las profundidades del mar: un mundo extraño que no es fácilmente accesible para todos. Al final, sin embargo, los aproximadamente 100 visitantes de la lectura en la Kulturgießerei parecían convencidos de que valía la pena explorar este mundo juntos.
Quelle: Volksfreund Trier
Poemas de pensamiento e imágenes de la vida
Dos personas autistas con síndrome de Kanner han escrito un libro, utilizando un método inusual.
Por Juliane Moghimi, Hannoverische Allgemeine Zeitung
Florin Müller, de 23 años, y Julian Bodem (27) son autistas. Fueron diagnosticados con autismo en la primera infancia, también conocido como síndrome de Kanner. Esta condición hace que sea imposible para ellos controlar sus cuerpos de la manera en que la mayoría de las otras personas pueden. La capacidad de hablar también se ve afectada, por lo que las personas autistas Kanner a menudo se clasifican automáticamente como discapacitados mentales. Sin embargo, Florin Müller y Julian Bodem no pueden hablar de una discapacidad intelectual. Uno escribe libros con poemas y textos en prosa, el otro pinta cuadros con agua y pinturas acrílicas. Ahora los dos amigos artistas del sur de Alemania vienen a Hanover-Ricklingen para una lectura interactiva en el Centro para la Competencia del Autismo. Sus textos serán presentados por Hannelore Kloth, una pedagoga especializada en el equipo de autismo. Con la ayuda de la llamada comunicación apoyada, ha permitido a los dos encontrar la manera de salir de su aislamiento. De este modo, los artistas pueden dejar que el mundo exterior participe en su vida del alma. "Podemos demostrar escribiendo que no somos estúpidos, sino que el sentido intelectual del ser y la sensibilidad está en nosotros, incluso si tememos que lo creas, sesgado por nuestro comportamiento, no correcto", escribe Florin Müller en el prefacio del libro conjunto "Palabras e imágenes de la vida". Florin Müller y Julian Bodem fueron publicados por de Ganymed Edition, una pequeña editorial en Hemmingen. Su fundador, Andreas Brandtner, rinde un gran respeto a los textos de su autor. "Florin tiene una forma muy especial de tratar el idioma alemán. Apenas lo editamos. Sus letras son muy auténticas y sorprendentes en muchos lugares". Para la lectura en Hannover, Simone Hatami abre el Centro para la Competencia del Autismo en Ricklingen, que ella fundó. Es trabajadora social, pedagoga social y practicante alternativa y asesora a adultos del espectro autista. Los pagos generales los enojan. "Aquellos que no encajan en la distribución normal gaussiana caen fuera del sistema. Todo el mundo tiene recursos y habilidades. Pero las personas autistas dependen de que alguien las mire de cerca y que reconozca lo que hay adentro ".
El domingo organizamos la lectura de los autores autistas no hablantes Julian Bodem y Florin Müller. Nos complace que tantas personas interesadas hayan participado en la lectura y hayan compartido sus impresiones con nosotros. Los dos autores y artistas mostraron de manera impresionante a la audiencia qué competencias yacen latentes en ellos. Nos gustaría agradecer a los oradores y su equipo por las ideas sobre su trabajo, un proceso sin problemas y a todos los participantes por el exitoso evento.
En una lectura en el Dillinger Seniorentreff, se presentaron dos obras del autista Florin Müller.
Si les preguntas sus nombres, no obtendrás una respuesta. Para presentarse, necesitan su computadora portátil. Sus dedos se desplazan inquisitivamente sobre el teclado, ingresan laboriosamente letra por letra y escriben junto a él. Un toque en el hombro, los ojos notan el error, que es corregido por los dedos. "Julian Bodem", entra uno de ellos, luego su amigo se presenta junto a él: "Soy el inútil Florin". Eso es todo lo que escribe. Su mirada vaga fugazmente desde la computadora portátil hasta su audiencia, que se preocupa por permanecer en silencio.
Inútil, así es como se sienten a veces. Julian y Florin son autistas y están atrapados en un cuerpo que no obedece su voluntad. Desde la infancia, los dos han sufrido del síndrome de Kanner, autismo de la primera infancia. Al igual que muchas personas autistas, les resulta difícil comunicarse con sus semejantes, nunca han aprendido a hablar. Para poder comunicarse, ambos usan sonidos que son en su mayoría incomprensibles para los extraños, una forma modificada de lenguaje de señas y su computadora portátil, a través de la cual expresan sus sentimientos y pensamientos. Birgit Müller, la madre adoptiva de Florin, sabe que esto es un gran alivio para ambos: "Sin la computadora portátil, todavía estaría haciendo reconocimiento de palabras hoy", dice ella.
Cuando Florin tenía cuatro años, ella y su esposo adoptaron al niño de un orfanato rumano sin saber sobre su discapacidad. Julian Bodem de Saarburg y Florin Müller de Dillingen informaron sobre cómo los dos perciben su trastorno durante una lectura interactiva en el Seniorentreff en Dillingen. Interactivo porque ni el escritor ni el ilustrador pueden hablar. Ambos dependen de la ayuda de sus familias, que leen los poemas y extractos de sus libros "El viaje a la estrella brillante o Un astronauta en el espacio" y "Palabras e imágenes de la vida".
Con un suave caricia en la mejilla o un toque suave en el hombro o la rodilla, la terapeuta Hannelore Kloth apoya a Julian y Florin, ayudándoles a controlar sus cuerpos. "Una persona autista a veces necesita un toque en el brazo para percibir dónde está su brazo", explica. Cuando Florin golpea su mejilla con su mano durante la lectura, Kloth toma la mano de su protegido y la baja. Cuando Julian reacciona a un pasaje de texto leído en voz alta con sonidos incomprensibles, ella le acaricia la espalda con tranquilidad y le ofrece apoyo psicológico. Les cuesta fuerza a los dos amigos soportar situaciones estresantes con calma. Poder que no siempre tienen. Luego estalla de ellos en acciones involuntarias. "Ninguna persona en este mundo puede tener la fuerza permanente para soportar cosas estresantes introvertidas sin ser herido", escribe Florin en su libro, expresando su deseo de contribuir con algo útil a la paz, la ayuda de emergencia y el amor. Muchos de sus poemas sensibles son retomados por su amigo Julian y representados pictóricamente. Este es también el caso del poema "Wut", sobre el cual Juliano pintó trazos apresurados y rápidos, subrayando así la importancia del poema. Una ira que ambos sienten. La ira por sus cuerpos encadenados, que los priva de libertad. Cuando Julian alcanza el pincel y Florin expresa líricamente sus sentimientos, ambos pueden quitarse los grilletes por un momento.
Por Tina Leistenschneider